Por Clara Riveros
Un disidente es aquel que diside, que se separa de una doctrina, de una creencia o de una conducta. ¿Expresión de madurez, de ética y de responsabilidad individual? La disidencia de individuos que han integrado movimientos revolucionarios ofrece diversos ejemplos notables de esa transición individual que implica la ruptura con una ideología totalitaria y la renuncia a combinar todas las formas de lucha. Hace algunas semanas se conoció la entrada en escena de una nueva plataforma saharaui que se desmarca del Frente Polisario y que rompe con ese modelo totalitario. En su comunicado fundacional el Movimiento Saharauis por la Paz (MSP) incorporó palabras como diversidad política, multipartidismo, desarrollo, modernidad y siglo XXI. El uso de estos términos corrobora la distancia que han tomado los miembros del MSP respecto de la doctrina, las creencias, las conductas y las prácticas del Frente Polisario. El tiempo demostrará si esta nueva plataforma también puede llegar a incidir en la superación de esa concepción tribal unanimista —todavía presente en la comunidad saharaui— para avanzar en la construcción de una sociedad civil democrática que incorpore en su cotidianidad y en su léxico el respeto por la diversidad y la diferencia, la individualidad, el individuo y el ciudadano, las libertades individuales y la universalidad de los derechos humanos frente a la tendencia dominante y persistente de absorción grupal.
La renuncia al totalitarismo tampoco es un proceso fácil o sencillo. Prueba de ello es que hay disidentes del Frente Polisario que permanecen en territorio argelino y que sufren el rigor del Polisario. A menudo enfrentan hostigamientos, amenazas y descalificaciones, así lo recogió el MSP en un nuevo comunicado. Entre tanto, militantes, activistas y simpatizantes del Polisario acusan a los disidentes de «traidores», afianzando así su carácter y absurda pretensión de encarnar la única representación legítima de la población del Sahara Occidental en su totalidad. Una afirmación que, desde luego, carece de fundamento y que desconoce deliberadamente la complejidad de ese contencioso. Esta semana hablamos con la primera autoridad del MSP para indagar en su lectura de la controversia territorial del Sahara Occidental, así como en sus memorias, trayectoria vital, disidencia del Polisario y posición actual al interior del naciente MSP. El secretario del Movimiento Saharauis por la Paz ha venido diciendo en estas semanas que ya es hora de ponerle fin al mito del Polisario como «único» representante de los saharauis y que «los tiempos de los partidos y pensamientos únicos ha quedado atrás […] desde el siglo pasado las controversias en política se dirimen en el debate sereno y respetuoso y en las urnas».
¿Cuál es su nombre? ¿Dónde nació y dónde creció?
Mi nombre es Hach Ahmed Bericalla. Nací en la ciudad de Dakhla (Ex Villa Cisneros de la época española). Soy el menor de una familia numerosa (seis varones y una única hermana). Crecí en esa ciudad, aunque desfilé junto a mi familia por varias localidades del interior (Auserd, Argub, Tichla, etc.,) siguiendo los destinos de mi padre que era miembro del ejército español (Tropas Nómadas).
¿A qué familia y tribu pertenece?